Comentario

Cuatro factores por tomar en cuenta sobre el futuro de sus espacios de trabajo

La rápida adopción de nuevas tecnologías obliga a las empresas a moverse a pasos agigantados. ¿Como crear espacios de trabajo dinámicos y a la vez innovar el modelo de negocio y a la fuerza de trabajo?

La tecnología está avanzando de forma exponencial creando innovación lo cual va a transformar de manera radical la vida de los consumidores y las operaciones de negocio. La rápida adopción de tecnologías significa que las empresas van a tener que moverse con gran celeridad.  ¿Como se pueden crear espacios de trabajos dinámicos que permitan a la vez hacer cambios al modelo de negocio y a la fuerza de trabajo de modo que aprovechen al máximo las nuevas oportunidades?

Echemos un vistazo al trabajo del futuro y los cuatro factores clave en los cuales se están enfocando empresas visionarias para tomar ventaja del cambio.

 

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1. Tecnología y bienes raíces para impulsar la innovación 

No es un secreto que estamos viviendo una era de tecnología disruptiva.  Bajo la nueva perspectiva de JLL titulada, El Futuro del Trabajo, se hace hincapié al hecho de que tanto la tecnología disruptiva como el cambio se han convertido en el nuevo estatus quo. Las empresas sobrevivientes a estos cambios lo serán en las próximas décadas.  Crearán nuevos productos, servicios y modelos de negocio a fin de poder tomar ventaja de las bondades de un creciente ecosistema de componentes digitales, conectividad y datos. La inteligencia artificial, el internet de las Cosas, la realidad aumentada, así como otras tecnologías permitirán a las empresas reinventar sus modelos de negocio y liberar nuevas fuentes de crecimiento. 

Resulta crítico un entendimiento sobre cómo es que los espacios de trabajo y los bienes raíces pueden proteger a los negocios contra la embestida del futuro estando dentro de un ambiente más volátil y competitivo. En una era en la que la tecnología permite trabajar desde cualquier sitio, los ambientes de oficina vendrán a representar mucho más que espacios de trabajo; van a ser componente medular en la creación de valor dentro de toda organización — zonas en las cuales los empleados, así como expertos y socios externos se reúnen para trabajar en la creación de nuevos productos, servicios e ideas. Surgirán nuevos tipos de espacios, los espacios incubadora (para empresas de nueva creación) y los espacios acelerador (para empresas de rápido crecimiento) se van a convertir en componentes clave en los espacios de trabajo, así como en las estrategias de innovación.

2. Sistemas de negocio y datos inteligentes para reinventar espacios de trabajo y mantener a los empleados conformes y productivos 

Los edificios inteligentes tienen ya varios años de existencia. Sin embargo, algunas de las actividades que se manejan de manera “inteligente” en ocasiones se limitan a tareas de índole operativa como el control de los accesos y el alumbrado. En el futuro, aplicaciones analíticas más avanzadas dentro de la oficina permitirán una captura continua de datos provenientes de sensores, dispositivos de mano y smartphones que servirán para monitorear la interacción y el trabajo al interior.  Los edificios aprenderán preferencias y darán respuesta automática con el fin de ajustar los ambientes “al gusto” al momento de ingreso.

Los datos se podrán utilizar para elaborar propuestas para mejoras en los diseños (intervention design) encaminadas a elevar el desempeño del negocio. A través del monitoreo de los espacios y los diversos tipos de interacción que ocurren en los espacios de trabajo — y su correlación con medidas estratégicas de negocio como, por ejemplo, número de lanzamientos de nuevos productos, factores decisivos o rotación de personal — pronto se podrán descubrir nuevas maneras de optimizar los espacios.

Los datos servirán de guía en el diseño conectando las metas estratégicas con las operaciones día a día. Los espacios de trabajo serán más modulares y rediseñados con más frecuencia para lograr una mayor efectividad en los costos. Las empresas podrán lograr lo anterior a través de esquemas de renta y no de compra de mobiliario a modo llevar a cabo reacondicionamientos o reacomodos más continuamente.  

3. Experiencias mucho más personalizadas para atraer y retener talento

El alto valor que dan las empresas a su gente va más allá de los bienes raíces cuando los funcionarios caen en cuenta que no basta con dar trabajo y un espacio donde trabajar — sino también de la necesidad de crear espacios en donde quieran estar. La vivencia humana resulta ser el gran diferenciador sobre el compromiso que adoptan las personas para con las empresas — tanto de manera estratégica como operativa.

La próxima generación de empleados serán dependientes digitales — o sea, aquellas personas que han crecido jugando con el iPad familiar y dependido de los smartphones.  Para atraer talento proveniente de esta cuadrilla de individuos, las empresas se verán forzadas a colocar en su lista de prioridades la experiencia de los usuarios dentro de los espacios de trabajo. Se anticipa la llegada de tecnologías de índole más previsora como, por ejemplo, elevadores que subirán de manera automática a pisos favoritos. 

Simultáneamente, nuestra sociedad está en constante búsqueda de mucho más valor agregado en la forma en que la gente vive y trabaja. Los espacios de trabajo requieren ser mucho más dinámicos a fin de dar cabida a una fuerza laboral “líquida” — o sea, mucho más flexible, más móvil, que comanda el equilibrio vida-trabajo y que es promotor del bienestar.

Con el fin de cubrir las expectativas de las próximas generaciones y elevar la productividad, el diseño de los espacios de trabajo incorporará con más frecuencia el trabajo en base a actividades diarias. Con este enfoque se da a los empleados acceso a espacios para trabajo individual o compartido ofreciéndoles más opciones a aquellos espacios que mejor se amoldan a sus necesidades diarias. Un servicio de alta calidad, desde alimentos y bebidas hasta salones de descanso y centros de acondicionamiento físico, se van a volver estándar para ubicaciones centrales.


4. Conectividad a internet como factor clave en la elección de ubicaciones 

La disponibilidad y velocidad del internet será un factor crítico en la productividad de los empleados “móviles” cuando éstos se trasladan de un espacio a otro dentro y fuera de la oficina. La creciente adopción a la conectividad, computación “en la nube” y otros componentes ya han sido causa de los grandes cambios que han surgido en los ámbitos social y cultural todo lo cual ha tenido un impacto en el trabajo y en las operaciones empresariales. 

De acuerdo con el reporte de JLL titulado, Workspace, Reworked, (Espacio de Trabajo - Reinventado) al menos un 80 por ciento de los adultos en el mundo contarán con un smartphone para el año 2025. El aumento de componentes que se habrán incorporado a los espacios de trabajo tendrá lugar con el lanzamiento de las redes a velocidad 5G que podrán operar sobre el Wi-Fi. Asimismo, el acceso a software, al almacenamiento de datos y a la infraestructura digital ha ido en aumento a través de los servicios de computación “en la nube”.  Todo lo anterior le añade, como nunca antes, una gran importancia a la velocidad de conexión y será factor determinante en el atractivo de los edificios ante inquilinos corporativos. 

Conforme se van prestando más servicios e incorporando más aplicaciones a través de “la nube”, las empresas están dependiendo más y más de la infraestructura de telecomunicaciones y contra apagones en sus espacios de oficina. La conectividad a red se está incrustando cada vez más al lienzo con el que están hechos los edificios. El diseño de los sistemas de cableado, la “nube” pública y la distancia-velocidad, así como la resistencia de las redes de comunicación serán percibidas como parte de las ventajas competitivas de las diversas ubicaciones. 

Al seleccionar nuevas oficinas, a menudo se confía en los datos de clasificación disponibles para identificar aquellas opciones que cuentan con excelente conectividad. WiredScore* ya clasifica edificios en 50 ciudades en base a su confiabilidad y velocidad de conexión. Las grandes firmas financieras han invertido ya billones en la construcción de rutas de comunicación e instalaciones de cómputo.  La necesidad por parte de todo tipo de industrias de tener acceso a una conectividad disponible en todo tiempo y momento, incluyendo velocidad y resistencia, no para de incrementarse. 

¿Estamos listos para el futuro del trabajo?

El mundo del trabajo está cambiando. Conforme la incertidumbre y la tecnología disruptiva se van convirtiendo en el nuevo estatus quo, toda empresa previsora va a transformar sus espacios de trabajo para  hacerlos más dinámicos y adaptables a las cada día más cambiantes realidades económicas, sociales y tecnológicas.  Los ejecutivos van a mejorar sus espacios de trabajo para convertirlos en centros de innovación y van a crear ambientes de trabajo que produzcan experiencias enriquecedoras lo cual ayudará a atraer y retener talento. 

El potencial con que cuentan los bienes raíces para ayudar a las empresas a lograr sus objetivos nunca ha sido tan grande — y recién comienza. 

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